Lola Casas Peña. Perfil biográfico.
Más de 40 años ejerciendo de maestra de Educación Primaria.
Formadora del profesorado.
Conferenciante sobre temas de literatura infantil y juvenil destinadas a padres, maestros y niños.
Más de cincuenta obras publicadas entre ensayos sobre literatura, cuentos y poesía para público infantil y juvenil.
Teniendo en cuenta que empecé a ejercer de maestra a los diecisiete años y que me he dedicado a la enseñanza durante más de cuarenta, es fácil deducir que ya tengo “una cierta edad”.
Siempre he trabajado en la enseñanza pública y, a pesar de los muchos problemas que rodean al mundo escolar, no llegué a sentirme nunca quemada. Últimamente, el panorama que presenta la situación me hace sufrir bastante.
Durante cuatro años, y junto a los alumnos de la escuela Camí del Mig de Mataró, mantuvimos correspondencia con el autor británico Roald Dahl. Fruto de esta relación, nació el libro Todol Dahl (Ed. La Galera)
También, junto a mis alumnos, he realizado cuatro medio-metrajes, dos de ellos premiados por el Departamento de Cultura de la Generalitat de Catalunya.
Dicen que soy poeta. La verdad es que yo no me lo creo del todo. Diría que, más acertadamente, soy una maestra que escribe poemas. Mi tarea consiste en jugar con las palabras y ofrecer los resultados a niños y jóvenes. Parece que a éstos les gusta ya que, en los quince años que llevo de escritora, tengo en mi haber más de cincuenta libros publicados. Por el momento me divierto mucho escribiendo. El día que me aburra, dejaré este trabajo y me pasaré a otras tares que me complazcan más.
Me encanta el medio radiofónico y, desde hace unos años, semanalmente, llevo a cabo un programa sobre literatura en Mataró Radio que lleva por título Un llibre no és una illa (Un libro no es una isla) También colaboro en la televisión local en un pequeño programa sobre recomendación de libros.
Me gusta mucho el cine y la música. Soy una gran admiradora del compositor ruso Diimitri Shostakovich. He creado letras para cantatas y CD. También me fascinan los pájaros y la meteorología. Si no hubiera sido maestra, me hubiera gustado ser director de orquesta. Si pudiera convertirme en ave, elegiría ser lechuza.
No leo nunca las críticas (ni sobre mis libros ni sobre los de los demás) No me he presentado nunca a un premio literario y, aunque no puede decirse nunca de esta agua no beberé, dudo que lo haga alguna vez.
Soy un poco cascarrabias, valoro el esfuerzo y la fidelidad y, siempre que puedo, procuro ser positiva.